Si no has visto esta serie y quieres verla, o si no has llegado todavía al final, entonces no sigas leyendo.
Sin lugar a dudas, esta temporada superó con creces la primera, sobre todo en cuanto al terror y la angustia.
Al principio parecía una majamama de elementos que no llegaban a ningún lado (psicópatas, aliens, nazis, monjas, demonios, etc). Sin embargo, el desarrollo del personaje de Lana Winters me dejó demasiado contenta.
A primeras no pensé que ella se robaría toda la historia, ya que el asunto comienza con la supuesta captura del psicópata «Bloody Face». Al final, vemos cómo una mujer termina luchando por sobrevivir y llegando hasta las últimas consecuencias, convirtiéndose en una persona fría y calculadora. De no ser así, la mina no estaría viva al final. Más que criticarla, uno termina entendiéndola y admirándola (por lo menos eso me pasó a mi).
La redención de la madre Jude también es bonita, aunque dejan todo el asunto alienígena totalmente abierto (y lo del diablo y el doctor nazi tampoco me dejó conforme).
¿Qué piensan ustedes, con qué sensación quedaron luego de ver el final? A mi me encantó y estoy ansiosa por ver si lograrán superarse en una tercera temporada.
El Blog de Valeria Luna 